¿Tú y tu pareja están pensando en comprar un departamento y empezar a vivir juntos? Aquella es una gran d2ecisión y podría ser el principio de una gran historia. Uno de los primeros aspectos en lo que tendrán que acordar una vez se muden al inmueble serán los gastos mensuales.
Si logran un consenso sobre la repartición de los pagos desde antes de mudarse, evitarán muchos problemas y confusiones. Por eso, en el siguiente artículo te mostramos cómo dividir los gastos en pareja.
Define cuáles son los gastos a compartir
Probablemente, ya sabes que los gastos en casa no se limitan solo a las cuotas mensuales del crédito hipotecario. Está el pago de los servicios, la alimentación, la limpieza y, ocasionalmente, el mantenimiento. Es también probable que tú y tu pareja tengan perspectivas diferentes sobre cuáles son los más importantes.
La importancia de algunos pagos como las cuotas del crédito, la luz y el agua es bastante obvia. Sin embargo, ¿cómo distribuir los gastos cuando la situación no es tan clara? Imaginemos que tu pareja tiene un auto y prefiere un departamento que tenga un espacio de garaje independiente. Obviamente aquello implica un monto extra. ¿Se dividirán los costos por la mitad?
Por este tipo de situaciones, debes asegurarte desde el principio que tú y tu pareja entienden los gastos necesarios de la misma forma. Lista todos los pagos que compartirán y los que no. La comunicación y un poco de paciencia te ayudarán a encontrar soluciones.
¿Qué método usar para dividir los gastos?
Ahora que tienes claros cuáles serán los gastos que compartirás con tu pareja, es momento de elegir un método para dividirlos. Afortunadamente, existe más de uno. Aquí te mostramos los que podrían ser más útiles:
1.- Dividir los gastos por la mitad
Con este método, los cálculos son relativamente sencillos: se divide cada uno de los gastos que han decidido compartir en un equilibrado 50/50. Aquí es importante que decidan con anticipación a nombre de quién estarán las cuentas.
Si el nombre de uno de los dos figura en las facturas, será más sencillo calcular cuánto se debe retribuir a esa persona. La desventaja es que uno de los dos terminará invirtiendo algo más de tiempo y esfuerzo en saldar las cuentas.
Si deseas compartir los pagos de forma más precisa, hoy en día existen varias aplicaciones para teléfono móvil que te permiten repartir los gastos en pareja, dar seguimiento a los pagos que cada uno realiza y asegurarse de que ambos contribuyan de forma equilibrada cada mes.
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2.- Dividir solo las cuotas del crédito
Imaginemos que trabajas por la noche y tu pareja durante el día. Si usualmente no cocinas o cenan juntos, ¿tiene sentido que dividan por la mitad los gastos de los alimentos? Tal vez la naturaleza de tu trabajo requiere un mayor uso de electricidad que tu pareja. En ese caso tampoco es lógico repartir todo por la mitad.
Dependiendo de tu situación, podría ser más conveniente revisar cada uno de los gastos y ver cuáles realmente vale la pena dividir y cuáles no. En este caso, un pago invariable serían las cuotas del crédito hipotecario, ya que ambos viven en el inmueble.
Si estás pensando que repartir la tenencia del inmueble será algo complicado, no te preocupes. Hoy en día los bancos ofrecen financiamiento que permite que dos personas puedan ser propietarias del mismo inmueble en partes iguales.
3.- Dividir los gastos en base a los ingresos
Otro escenario muy común es que ambas personas tengan niveles de ingresos muy diferentes. Aquí no se siente muy justo dividir los gastos en partes iguales. En ese caso, se puede repartir los pagos en proporción a cuánto dinero gana cada uno. Lo ideal es que sumen sus ingresos a fin de determinar cuál es el porcentaje del que cada uno será responsable.
Abre una cuenta de banco
Independientemente de cómo elijas dividir los gastos en pareja, te podría ser muy útil abrir una cuenta compartida en el banco. En esta, cada uno puede contribuir con los montos acordados. La mejor parte es que es posible hacer los pagos directamente desde aquella cuenta.
De esta forma, ambos pueden ver de forma precisa en qué se emplea el dinero compartido y mantener la transparencia. Además, permite que ambos mantengan una independencia financiera para cualquier otro propósito.
Ahora conoces mejor cómo dividir los gastos de la casa de forma simple y hacen más agradable la vida en pareja. Encuentra el inmueble que te ofrezca el estilo de vida que buscas y empieza tu nueva vida de la mejor forma.
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