A los 20 años, comprar un departamento puede parecer un sueño imposible. Quizá recién te graduaste y debes vivir con un sueldo básico, o estás ahorrando para realizar tu maestría. No obstante, en la actualidad, muchos jóvenes logran cumplir esta meta. ¡Tú también puedes ser uno de ellos! Lee nuestra guía y descubre cómo comprar departamentos a una edad temprana.
Ventajas de comprar un departamento a una edad temprana
Las ventajas de comprar un departamento son innumerables, en especial cuando eres joven. Un inmueble es una inversión rentable a largo plazo, y la mayoría de los jóvenes disponen del tiempo necesario para asegurarse de que crezca.
Al ser dueño de tu propio departamento, tendrás la oportunidad de:
- Venderlo a un mayor precio en el futuro.
- Convertirlo en una propiedad de alquiler.
- Remodelarlo cuando creas conveniente.
- Disfrutar de una vivienda segura durante tu jubilación.
¿Cómo saber si estás listo para comprar un departamento?
En términos legales, puedes comprar y ser propietario de tu propio inmueble a partir de los 18 años, cuando alcanzas la mayoría de edad. Sin embargo, a la hora de adquirir un departamento, hay factores mucho más importantes que la edad.
Esta es una compra grande y costosa, por lo que te aconsejamos que esperes hasta que tengas una fuente de ingresos constante, un trabajo estable y una buena puntuación crediticia. De esta forma, podrás obtener un préstamo hipotecario asequible que te ayude a financiar tu inmueble.
¿Qué debes tener en cuenta antes de comprar un departamento?
Antes de empezar con el proceso, debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
1. Tu profesión
¿Tienes un trabajo estable y planeas quedarte allí por mucho tiempo? ¿Tendrías que viajar a otras ciudades por motivos laborales y, por ende, mudarte? Es esencial que te hagas este tipo de preguntas antes de tomar cualquier decisión.
Recuerda que debes vivir en aquella propiedad al menos el tiempo suficiente para terminar de pagar la hipoteca y restablecerte económicamente. Por lo general, solo es buena idea comprar un inmueble cuando planeas quedarte en él durante tres años como mínimo.
2. Tus ingresos
Antes de comprar un departamento a una edad temprana, debes considerar cuánto dinero ganas y qué parte de tu sueldo podrás destinar a este financiamiento. No olvides que también tendrás que costear el mantenimiento, reparaciones y otros gastos. Asegúrate de tener los ingresos necesarios para cubrir la compra sin afectar tus gastos mensuales habituales.
3. Tu compromiso
Comprar un inmueble siendo joven requiere de bastante compromiso de tu parte. A diferencia de rentar un departamento, serás tú el responsable de todas las reparaciones y pagos pendientes del mismo.
Analiza tu situación y cerciórate de que estás preparado para asumir todo lo que conlleva ser el propietario de tu propia vivienda. Asimismo, te recomendamos tener un fondo de emergencia en caso de gastos inesperados.
Consejos para comprar un departamento siendo joven
¿Tus objetivos y tus finanzas coinciden? ¡Enhorabuena! Sabemos que este proceso puede parecer complicado; por ello, aquí te damos 3 consejos para comprar un departamento siendo joven.
1. Chequea tu historial y puntuación crediticia
Independientemente de tu edad, las financieras revisarán tu historial y puntuación crediticia antes de aprobar o rechazar tu solicitud. Basándose en ellos, decidirán si eres o no un buen candidato para el crédito.
Ponte en contacto con tu banco, revisa tu historial crediticio y soluciona los problemas presentes en él. De la misma manera, trabaja en mejorar tu puntuación si aún no es la deseable, paga tus deudas a tiempo y evita tener varias tarjetas de crédito.
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2. Ahorra para el pago inicial
La mayoría de los bancos y entidades financieras te aconsejarán realizar un pago inicial del 20% del precio total del inmueble. Si bien esto no representa un gran gasto, puedes pedirle ayuda a tus padres o solicitar una subvención para financiarlo sin problemas.
El pago inicial de tu departamento te ayudará de forma considerable a reducir la tasa de interés y la cantidad de dinero que pagues en las cuotas mensuales. Cuanto mayor sea el pago inicial, menos tendrás que pedir prestado a tu prestamista.
3. Prepárate para otros gastos asociados
La hipoteca y el pago inicial de tu departamento no serán los únicos gastos que asumirás. Es probable que debas comprar muebles y electrodomésticos nuevos. Además, tendrás que pagar los gastos de mudanza, servicios e impuestos sobre la propiedad.
Mantente organizado y evita gastos innecesarios para ahorrar la mayor cantidad de dinero posible. Dale prioridad a este proyecto y consulta con un experto en finanzas para que te ayude a tomar las mejores decisiones acorde a tu situación.
Como verás, adquirir un inmueble siendo joven es más sencillo de lo que parece, siempre y cuando te sientas listo y estés dispuesto a cumplir con todas las responsabilidades que este proceso conlleva. ¡Esperamos que esta guía para comprar departamentos a una edad temprana te haya sido de ayuda!
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